EL Pajón
Por Felicia Vásquez (1948 -)
Es orgullo de la flora.
Es el rey de la sabana.
Es la planta soberana
cuyo tallo se incorpora
imponente, pues no implora
clemencia del sol quemante.
Y se yergue desafiante,
ya sea Dulce o de Novillo.
Y ofrece en color y brillo
la visión más deslumbrante.
Para abrevar, el guerrero
clava su raíz sedienta
en la fuente que alimenta
el paso del aguacero.
Es allí en ese venero
donde el Dulce halla belleza.
Allí está la fortaleza
que el de Novillo recibe.
Cada uno bien exhibe
su don de naturaleza.
Para el toro y el potrillo
el pajón Dulce es sabroso.
Muy suave y algo jugoso.
Diferente al de Novillo,
pues corta como cuchillo
el borde de su follaje.
Mas en su tronco hay coraje
presto para la atadura
en medio de la llanura
del animal más salvaje.
Los pajonales llaneros
viven en cada rincón
del sueño y el corazón
de sus hombres tesoneros.
Esos que igual que guerreros
conservan en la memoria
los cánticos de victoria
que endulzaron su camino.
Y que ataron su destino
con los lazos de la gloria.
Publicado en Felicia Vásquez (2019) “Bajo el sol de Guabatico”. Banco Central. Santo Domingo.
Usado aquí con permiso de la autora.
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