Americana
Homenaje a Cuba y a Martí
A Fed. Henríquez y Carvajal Cántame el viejo canto, el viejo canto, el de las notas bravas, el del aliento del pulmón de Hércules, el del empuje de crecidas aguas.
Cántame el viejo verso, el verso heroico, el de la musa trágica, el del canto insurrecto en la manigua, el verso del clarín y de la diana.
¿No ves teñirse en púrpura los cielos? No ves la vieja guardia, de pié, como un titán, en la trinchera, desceñida del cinto el arma blanca...?
¿No escuchas en el seno de la sombra la vibración de un harpa; una voz que departe en las alturas con el viejo coloso de la fábula...?
¿No ves en el levante un punto de oro, una chispa que irradia, una visión de luz adolescente como la virgen proyección de un alma...?
Esa púrpura roja es el incendio! la aurora de otra patria! Esa legión que ciñe la trinchera es la legión titánica, la misma de Pichincha y Ayacucho, la misma del Naranjo y de las Guásimas!
Ese canto en la sombra es la epopeya! Es Homero que pasa! La musa de Junín que se despierta con su perfil de india americana!...
Cántame el viejo canto, el viejo canto, el de las iras santas... Esa voz de la altura, es la del genio! Bolívar que delira en la montaña!
Cántame el viejo verso, el verso heroico, el himno de la patria, el del canto insurrecto en la manigua, el verso del clarín y de la diana! El punto de oro que en la sombra crece es el ojo del águila, la pupila del sol de las Américas: La Estrella Solitaria!
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