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José Núñez de Cáceres (1772-1846)

NOTA: Esta biografía es un resumen de la versión mas extensa presentada en las páginas biográficas de Mi Pais.

José Núñez de Cáceres

José Núñez de Cáceres fue un político, abogado, escritor, maestro y presidente del estado independiente del Haití español. Nacido el 14 de marzo de 1772, en la ciudad de Santo Domingo (Capitanía General de Santo Domingo; en la época que la isla de Santo Domingo era aún colonia de España). Es considerado el primer prócer independentista de la colonia. Para entender su papel en las guerras de independencia lea el artículo sobre La Lucha por la Indendencia en MiPaís – La República Dominicana.

Eran sus padres Francisco Núñez y María Albor. La madre murió pocos días después del nacimiento del niño que el 23 de marzo de aquel mismo año fue llevado a la pila bautismal por su tío el Deán D. José Núñez de Cáceres. Creció bajo los cuidados de una tía suya pobrísima, María Núñez.

Desde temprana edad, Núñez de Cáceres demostró gran amor a los estudios; su padre era hombre de campo, trabajador y honrado, pero miraba con desdén el amor de su hijo a los libros, pues quería dedicarlo a las labores del campo. Núñez de Cáceres creció en la mayor miseria, porque su padre le escaseaba los recursos y este estado llegó a extremo tal, que tenía que estudiar en los libros de sus condiscípulos, pues nunca tuvo propios todos los necesarios y se presentaba en la escuela con trajes humildísimos y descuidados. Para ganar algo y ayudar a su tía, pregonaba y vendía por las calles las palomas que un conocido suyo cazaba para especular con ellas.

El padre de Núñez de Cáceres se llevó a su hijo al campo, pero no pudo conseguir distraerlo de los libros y hacerle coger amor a la agricultura. Viendo esto consintió en que el hijo volviera a la ciudad, pero advirtiéndole que no debía contar más con la protección paterna. Núñez de Cáceres duplicó los esfuerzos para concluir sus estudios, a los 23 años obtuvo la Licenciatura en Derecho Civil; formó una distinguida clientela y llegó a ser catedrático en la Universidad de Santo Tomás de Aquino.

Al finalizar el siglo 18 contrae matrimonio con Juana de Mata Madrigal Cordero. De su unión nacieron seis hijos: el primero, Pedro, nació en Santo Domingo el 2 de abril de 1800, y la última, María de la Merced, en la misma ciudad en 1816.

En 1799, como consecuencia del Tratado de Basilea, trasladaron a la Real Audiencia a Puerto Príncipe (actual Camagüey) de Cuba y allá fue Núñez de Cáceres nombrado Relator por Carlos IV en agosto de 1800, lo que no le impedía ejercer su profesión de abogado.

En Camagüey nacen tres de sus hijos: José, el 9 de septiembre de 1804; Francisco de Asis, el 15 de septiembre de 1805, y Gregorio, el 8 de junio de 1809.

Volvió a su patria luego de la Reconquista y el 29 de junio de 1810 fue nombrado Teniente Gobernador, Asesor General de Gobierno de Intendencia y Auditor de Guerra de la provincia de Santo Domingo. En el ejercicio de estas funciones se destacó por su probidad y por el empeño que puso en mejorar la situación económica de la colonia, prácticamente arruinada.

El 6 de enero de 1815 se reinstaló, por gestiones que hizo cerca del capitán general, la antigua Universidad de Santo Domingo. El claustro de doctores, “en consideración a tan meritorio rasgo”, según dice el Dr. Morilla, eligió primer rector de ese instituto a Núñez de Cáceres y acordó que su retrato, costeado por el gremio, se colocara en el aula magna.

Fundó, en Santo Domingo el periódico El Duende (primer número publicado el 15 abril 1821), un periódico de opiniones donde se publicaron varias de sus producciones literarias. Luego también creó otros periódicos en Venezuela y Mexico.

Tuvo choques constantes con las autoridades y muy particularmente con Juan Sánchez Ramírez, artífice de la Reconquista. A la muerte de éste solicitó el empleo de Oidor de la Real Audiencia de Quito, que estaba vacante, pero encontró gran oposición en la Corte y no consiguió lo que deseaba. Poco después inició sus trabajos revolucionarios, no para conquistar autonomía absoluta para la colonia española, sino para ponerse bajo el protectorado de Colombia.

El 30 de noviembre de 1821 realizó el movimiento separatista del dominio de España, luego llamado “Independencia Efímera”. Al día siguiente, sábado 1ro. de diciembre, la bandera de Colombia reemplazó la de Castilla en la parte oriental de la Isla de santo Domingo; se instaló una junta como Gobierno Provisional, cuya presidencia le tocó a Núñez de Cáceres; se dictó una constitución que contenía un borrón de ignominia, inaceptable por los tiempos que corrían. Ese borrón fue el mantenimiento de la escalvitud, pues Núñez de Cáceres dijo que “no sería su mano la que de una plumada redujera a la miseria a sus conciudadanos.”

Como Núñez de Cáceres no encontró en Colombia el apoyo que buscaba, Jean Pierre Boyer, Presidente entonces de Haití, declaró que el territorio de la isla era uno e indivisible, e invadió la parte española. El mismo Núñez de Cáceres, siete semanas después, hizo arrear la bandera colombiana y reemplazarla con la haitiana, el sábado 19 de enero, y el sábado 9 de febrero de 1822, “aturdida la conciencia por el remordimiento” entregó al Presidente Boyer en persona las llaves de la ciudad de Santo Domingo. Boyer manifestó entonces a Núñez de Cáceres que su presencia era un inconveniente en la isla y que si no se ausentaba de ella voluntariamente, lo embarcaría por la fuerza.

Núñez de Cáceres se dirigió a Venezuela; se dedicó al foro y al periodismo, y redactó El Cometa, periódico que atacó duramente a Bolívar. Eventualmente Núñez de Cáceres hizo residencia con su familia en México, donde primero se estableció en la ciudad de San Luis Potosí y luego en Ciudad Victoria, capital del Estado de Tamaulipas.

En los primeros años, se ocupó en el ejercicio de la abogacía. En 1830 fue nombrado fiscal de la corte suprema de justicia. En 1833 fue elegido senador del Estado de Tamaulipas y miembro del Congreso de la Confederación mexicana. En ese mismo año se le designó Ciudadano Benemérito de Tamaulipas. En 1834 fue designado tesorero de Hacienda Pública, cargo que alternó con el ejercicio de la abogacía. Hacia 1844 enfermó gravemente y el Gobierno del Estado y la Junta Departamental de Tamaulipas le asignaron una pensión “para su socorro en el lecho de dolor”. El 11 de septiembre de 1846 falleció en Ciudad Victoria, Tamaulipas.

José Núñez de Cáceres es el eslabón poético entre el siglo XVIII y XIX de la literatura del país. Antes de él, en una época dominada por la prosa, sólo se conocen pocos versos. Lamentablemente sólo se conservan una pequeña cantidad de sus obras. Escribió algunas fábulas en forma de poemas, principalmente en el periódico El Duende, bajo el seudónimo “El Fabulista Principiante”, por lo que se le considera el primer fabulista dominicano, y uno de los primerors en América Hispánica. Ver algunas de sus fábulas mas abajo.

Poemas y Fábulas

Advertencias: En las obras siguientes se ha mantenido el uso de mayúsculas, puntuación y deletro usado en las fuentes originales. Además, debe notarse que la mayoría de las fábulas de José Núñez de Cáceres aluden a sucesos de su época, lo que los hace más difíciles de entender

Fábulas

  1. El Conejo, los Corderos y el Pastor
  2. El Palomo, la Paloma y la Lechuza
  3. La Lechuza y la Cigüeña
  4. La Araña y el Águila
  5. El Mulo y la Acémila
  6. El Lobo y la Raposa
  7. El Abejarrón y la Abeja

Otras fábulas no presentadas aquí incluyen: Los Topos en Consejo, Burro Estudiante y el Mulo Médico, El Camello y el Dromedario, El Tigre y el Lobo Reconciliados.


Referencias

  1. Balaguer, Joaquín. Los Próceres Escritores. 5ta. Edición. Editoria Corripio, Santo Domingo (R.D.). 1995.
  2. Rodríguez, Cayetano Armando. Geografía Física, Política e Histórica de la Isla de Santo Domingo o Haití. 1915.
  3. Dos Siglos de Literatura Dominicana (S.XIX-XX). Poesía. Colección Sesquicentenario de la Indepencia Nacional.
  4. Miguel Collado. 2020. José Núñez de Cáceres, uno de los primeros fabulistas de Hispanoamérica. El Nuevo Diario.
  5. Emilio Rodriguez Demorizi. 1946. Fábulas Dominicanas. Editora Montalvo, Ciudad Trujillo.